Cuando los justos muertos y los redimidos hallan sido reunidos " seran arrebatados en las nubes, a recibir al Señor en el aire" y comenzara el maravilloso viaje de 7 dias al cielo. "La carroza de nubes tiene alas a los lados y debajo de ella hay ruedas vivas ; al elevarse la carroza , las ruedas exclaman: "Santo", y las alas al moverse , exclaman "Santo"; el sequito de angeles , exclama "Santo, santo santo, Señor todopoderoso". Y todos los redimidos dicen: "¡Aleluya !. mientras la carroza avanza hasta la ciudad celestial. Hablando de este gran viaje, Urias Smith dice : "De nuestro pequeño mundo pasamos a nuestro sol, situado a 172.230.000 km; de el , al sol mas proximo, distante 35.188.000.000.000 de km; luego a la gran estrella polar, desde la cual la luz, en su marcha vertiginosa de 3.310.000 km/seg., necesita 40 años para llegar a nuestro mundo; pasamos luego por sistemas, grupos, constelaciones, hasta llegar a la gran estrella Alciona en las Pleyades, cuyo brillo es 12.000 veces mayor que nuestro sol". ¿Es extraño que despues de semejante viaje la gran compañia de los redimidos prorrumpa en un cantico de victoria diciendo: "Grandes y maravillosas son tus obras, Señor Dios todopoderoso?" Despues que los redimidos llegaron al cielo, Juan oyo que cantaban el coro de aleluya. No intenta decir cuantas voces formaban el coro, sino refiere lo siguiente:" oid una gra voz de gran compañia". Las palabras que les oyo cantar fueron las siguientes:" Aleluya: Salvacion y honra y gloria y potencia al Señor Dios nuestro". Su primer pensamiento no se ocupa del beneficio que reciben, ni de las coronas y arpas que lea han dado , ni de las mansiones que tendran por hogares eternos. Piensan ante todo en honrar a su rey con expresiones de gratitud y amor. Sus juicios son veraderos y justos; porque El... ha vengado la sangre de sus siervos." Los seres celestiales y los santos se regocijan en los juicios justos de Dios, no porque sientan enemistad hacia las victimas desgraciadas de esos juicios, sino porque la sabiduria, la justicia, la bondad de Dios, han sido vindicadas. Los impios fueron invitados e instados a venir pero despreciaron la invitacion y mataron a los portadores de ella. "Y otra vez dijeron Aleluya". Este comentario lo encontre en un libro llamado "EL GRAN PLAN DE DIOS"(editado por Casa Editora Sudamericana en el año 1936) que pertenecio a mi padre cuando hizo su pasaje por el Colegio Adventista de Puiggary, Entre Rios, Argentina. Bendiciones.
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